sábado, 19 de octubre de 2013

Héroe de la FE

Ten en cuenta este mensaje para ser un verdadero heroe de la FE.




Destino Jeremías 1:5 Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones.

Carácter Josué 1: 9 Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.

Fe Hebreos 11:1 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.

Intimidad Salmo 25:14 La comunión íntima de Jehová es con los que le temen,
Y a ellos hará conocer su pacto.

Desafío Josué 1:2 Mi siervo Moisés ha muerto; ahora, pues, levántate y pasa este Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que yo les doy a los hijos de Israel.

martes, 8 de octubre de 2013

Esperar en el Señor


Algunas veces pensamos que esperar en Dios implica NO hacer nada, estar cómodamente sentados esperando que Dios aparezca como cuando estamos esperando el autobús.

Pensamos que esperamos en Dios de una forma pasiva, sin embargo debemos esperar en Dios activamente, veremos la palabra esperar y lo que implica teniendo en cuenta el original hebreo.

Hay cuatro palabras hebreas que se han traducido por la palabra ESPERAR.

1. La primera palabra que veremos es QAVAH

Significa mirar a Dios, unirse a Dios, estar atado o ligado a Dios. La palabra QAVAH tiene que ver con nuestro espíritu mirando a Dios y uniéndose a El.
“.. pero los que esperan (QAVAH) en el SEÑOR renovarán sus fuerzas; se remontarán con alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán.”
Isaías 40:31
“Porque los malhechores serán exterminados, mas los que esperan (QAVAH) en el SEÑOR poseerán la tierra.” Salmo 37:20
“Bueno es el SEÑOR para los que en El esperan (QAVAH), para el alma que le busca.” Lamentaciones 3:25

Cuando esperamos en Dios teniendo en cuenta está palabra recibimos los deseos de Dios, recibimos los pensamientos de Dios, recibimos la Palabra de Dios y llegamos a ser uno con el Señor. “. . . pero los que están unidos al Señor, renovarán sus fuerzas; se remontarán con alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán.”

Aquí encontramos un ciclo: volar (1), correr (2), caminar (3) y esperar (4) . . . cuando estamos unidos al Señor, el Espíritu Santo nos da alas para volar, en otras ocasiones nos hace correr y en otras nos hace caminar, y en otras ocasiones nos hace descansar esperando en El.